El puntero del Clausura viajó a Tres Arroyos a definir frente a Villa lo que podía ser la vuelta olímpica. Y asi parecia cuando Landa, promediando el 1er. tiempo ponía las cosas 1 a 0. Gran parte del segundo las cosas se mantuvieron por ese andarivel, hasta que llegó Principe a los 34' para amargarle la tarde a la parcialidad del Ventarrón poniendo el 1 a 1. Pero 1 minuto despues Landa volvió a poner el resultado de color rojinegro. El partido era tan apasionante a esa altura que 3 minutos despues Villa vuelve a empatar y para que contar como estaba la parcialidad del Globo con la oreja en la radio por lo que pasaba en Tres Arroyos. Pero la hinchada que hizo 45 kilometros desde Chaves hasta la cancha de Villa no viajó de gusto, sabe de las hazañas del Ventarrón. Y esta fue una de ellas. Cuando expiraba el tiempo complementario, el presidente de la institución dijo, "esto no puede quedar asi" y alli se fue a poner en persona un cabezazo que definiera el 3 a 2. Pero como el arbitro adicionó unos minutos mas, Landa quiso poner su sello final y a los 48' marcó el 4to. y definitivo gol.
4 a 2 y a esperar que pasaba con Huracán - Colegiales.
En la cancha del Globo, la tradicional garra de las camisetas albas estaba afiladisima.
La presión del triunfo del once de Auzmendi obligaba a ganar o ganar. Quizas eso mismo condicionó un trabajo mas desenvuelto e hizo que Colegiales se pusiera en ventaja a los 32' rente a un Globo que estaba por ese entonces desdibujado. Sin embargo, hay hombres que siguen haciendo honor a eso de la tradicional "garra" de Huracan (lo que ahora llaman actitud), y en ese plan se puso Echayre que marcó el empate cuando ya se iban a vestuarios. En el 2do. tiempo, Huracán fue una tromba y mas alla del 2 a 1 marcado por Federico Quiroga a los 39' tuvo un par de oportunidades mas de convertir el encuentro en una goleada. Ni que hablar que la tribuna "Luis Turco Leonardi" hizo escuchar ese gol hasta en la misma plaza donde una caravana con banderas rojinegras aguardaban el resultado de un empate para festejar el campeonato.